"EL HIJO DE PANDORA" (1967-68)
¡¡Una explosión de formas y color!!
Todas las creaciones pictóricas cuentan una historia, sin embargo las pinturas de Juan C. Carmona llevan tras de sí múltiples y atrayentes historias, especialmente aquellas realizadas en su época de juventud (1964-1974), muchas de las cuales han permanecido durante décadas a recaudo de otras personas, debido a que por entonces, Carmona, al carecer de un lugar propio donde vivir y crear, andaba de pensión en pensión, pintando y viviendo en casa de amigos y conocidos, y repartiendo sus enseres, sus escritos de juventud y sus pinturas por viviendas y locales de aquellos que le apreciaban y se prestaban a ello.
"El Hijo de Pandora" (1967-1968) pintado entre los 16 y los 17 años de edad y "El Sueño de la Trapera" (1968-1969), obra consecutiva, son pinturas que han convivido unidas y enrolladas durante más de 50 años, hasta que en el año 2022 han vuelto de nuevo a las manos de Carmona entre otras creaciones, enseres y escritos.
Ambas pinturas están plasmadas sobre sábanas, soportes habituales y gratuitos usados por el pintor en aquella época, entre otros, salvándose de las destrucción "por los pelos" al permanecer almacenadas durante medio siglo en un altillo de una casa situada en el madrileño barrio de Carabanchel Bajo, que el huracán "Filomena" acaecido en enero del año 2021 lo dejó al borde de la ruina.
Y su autor nos explica:
“Estas dos pinturas venían pegadas entre sí y me temí lo peor, pero cuando conseguí despegarlas no cabía en mi de gozo al observar su buen estado de conservación, salvo algunos leves desperfectos por los bordes.
No ha sido sólo la suerte la que ha jugado un papel fundamental en su salvación, sino la imprimación de base que les daba a los soportes gracias a mis conocimientos de pintura industrial y a la gran calidad de los pigmentos plásticos de entonces. Pintadas ambas obras con pintura plástica industrial, les puedo asegurar que de haber sido óleos el deterioro sufrido habría sido prácticamente irreparable. Y, sin embargo, ahí tienen esta pintura, realizada con espátula, colocada en un bastidor que también les he confeccionado a ambos cuadros, más dos sendos marcos, uno para cada pintura.
De modo que ante la falta de aprendices a quienes transmitir mis numerosos conocimientos sobre estas y otras muchas y variadas materias decorativas, estas técnicas artísticas, de mi propia cosecha, se perderán, tal y como viene sucediendo a través del devenir histórico, y tan sólo quedarán esbozados los métodos y expuestas las imágenes en algunos de los apartados de mi bibliografía, contando, además, con mis numerosas creaciones pintadas con material acrílico o pintura plástica industrial que permanecen inalterables a través del tiempo”.
El hijo de Pandora (1968-1969) es una explosión de vida y de colorido representativo del Universo, donde abstracción y figuración se complementan creando un mundo de ensueño en el que se gesta una nueva generación que, sin freno, sigue las directrices de su madre "Pandora" quien, alegóricamente hablando, abrió la caja que contiene todos los males, en continua expansión de la eterna maldad por el planeta Tierra.
En el dorso de esta pintura, Carmona escribe de puño y letra su pensamiento: certeras máximas y reflexiones de carácter visionario, frecuentemente impresos, bien en leyendas que presiden sus creaciones o en la parte posterior de muchos de sus cuadros de su etapa juvenil.
Mientras que "El Sueño de la Trapera" pintura de carácter onírico, plagada de una simbiosis de elementos fantásticos y reales, realizada por Carmona entre los 17 y los 18 años de edad (1968-1969), es una obra desbordante de creatividad y vitalista colorido, que sin duda merece dedicarle un artículo en exclusiva.
Características:
El hijo de Pandora. Año 1967-68. (Obra enmarcada con un marco realizado por su autor(.
Pintura plástica industrial sobre una sábana. Medidas: 184,5 x 125,5 cm.
Autor: Juan Castro Carmona, "El Sevillano". (Firma del autor en su época de juventud).